McLaren-Perez: Crónica de una ruptura anunciada

Incierto es el futuro de Sergio Perez en la F1

Algunos se sorprendieron con la decisión de McLaren de dar por concluida la relación con Sergio Pérez. En realidad, estamos frente a un final que se vino anunciando desde un principio. Nos explicamos:

Claramente, el piloto mexicano daba el año pasado salto a una escudería con la historia que tiene sobre sus espaldas McLaren, nada más y nada menos que en el año de su cincuenta aniversario. Sobre sus espaldas recaía ser el sustituto del otrora niño mimado de la escuadra: Lewis Hamilton que partía en busca de nuevas motivaciones hacia Mercedes.

Pero fue desde dicho anuncio,  cuando se comenzó a gestar el primer síntoma de que algo podía fallar en la naciente relación. Pocos lo vieron, muchos menos lo destacaron.

Si observamos las reseñas que preparamos en este blog de las últimas carreras del año pasado, destacábamos con asombro que el mexicano había, dejado de sumar puntos en Sauber desde el citado anuncio. Era como que el peso de la responsabilidad que se avecinaba lo hubiera paralizado.

Pérez venía de una temporada más que destacada a bordo de un competitivo Sauber que era gentil con el consumo de las cubiertas lo que, a la postre, le permitía realizar agresivas estrategias basadas en la economía del consumo del caucho y, por ello, menos paradas a realizar. La ecuación de la eficiencia en esta era de la F1 sustentada en las endebles cubiertas Pirelli. 

El segundo puesto en Monza 2012 lo puso en el centro de los comentarios y, gracias al apoyo de Adrián Fernández (ex piloto de Indy Car) quien, asumiendo el rol de manager, obtuvo para Checo una de las butacas más deseadas de la parrilla.

¿Quien no soñó con correr en McLaren? Es, luego de Ferrari, la escuadra más ganadora de la historia de la F1. Fittipaldi, Hunt, Prost, Lauda, Senna, Hakkinen y Hamilton son quienes gritaron campeón en sus huestes. Muchos pilotos más han obtenido triunfos memorables.

La contratación se debió a la gran gestión de Adrián Fernández y la intempestiva salida de Hamilton que puso en apuros a los de Woking. Muchos, previamente, situaban en Ferrari a Sergio (quien era piloto protegido de la escuadra) pero, en Maranello, dijeron que era muy apresurado darle una butaca top. Los italianos no se equivocaron, el tiempo les dio la razón. Por su parte, McLaren apostó fuerte, y se equivocó.

Checo en la pretemporada manifestaba que llegaba a McLaren para ser campeón. Una declaración que no pudo superar el rango de 'deseo'. El McLaren MP4-28 se mostró indócil desde un principio. La temporada se avecinaba dura, difícil. Pérez no supo manejar la presión. Ante un auto irregular (por no resultar una evolución del efectivo MP4-27 del 2012), McLaren encontró en Button un piloto consistente en la suma de puntos. Por su lado, Sergio entraba en roces con Alonso, Raikkonen y, para mal de males, con una absurda maniobra en Bahrain se puso rueda a rueda con Jenson Button a 300 km por hora y, desde ya, se ganó el disgusto de su coequiper. A Checo le dijeron que tenía que ser más agresivo, pero pareció que interpretó literalmente la consigna.

La temporada transcurría y Pérez no salió nunca de su oscuro letargo siendo en la mayoría de las ocasiones superado por Button. Recordamos que el inglés fue campeón del mundo en 2009 y subcampeón en 2011. Destacamos ello porque cierta prensa se olvida de los palmares del inglés.

Para fines de septiembre comenzó a rondar el rumor de que la relación Perez-McLaren ya no era la misma, que peligraba el ejercicio de la opción. Martin Withsmarsh dijo que contrataría si pudiera a Alonso, y no descartaba hacerlo para el 2014. ¿Puede uno sorprenderse con la decisión final? No, sinceramente.

Es cierto, Checo remontó su rendimiento en las últimas carreras, pero ya era tarde. Hoy, aquellos que analizan fuera del contexto la noticia -y no ve con ojos críticos, ya sea por amistad o interés económico- intentan mostrarnos a McLaren como el culpable de todos los males. No coincido con ello, por más que duela decirlo, hay que ser objetivos y Sergio Pérez es el máximo responsable de este oscuro presente. Y digo el máximo ya que parte de la culpa le cabe a los directivos de Woking también, quienes no supieron enderezar la relación. Pero nadie puede afirmar que el futuro de Checo en 2014 en la F1 está en peligro por esta supuesta decisión tardía.

¿Qué sucedió? Sergio no vio ni se adecuó al contexto que lo rodeaba. Por el contrario, se cerró en su mundo. Si algo salía mal, la culpa era del carro, de los otros pilotos, de la pista, en fin, de todos menos de él. Puede que algunas veces haya tenido razón, pero de autocrítica el mexicano obtuvo un reprobado con honores.

La prueba final de ello es la entrevista de comienzos de esta semana en la que critica duramente a McLaren calificando a los de Woking como un equipo con falta de organización. Afirmar ello es casi una broma, una defensa caprichosa. McLaren es la escuadra más organizada de la F1. Su centro tecnológico en Woking es un ejemplo, la filosofía de trabajo es superlativa, digna de estudio en los centros universitarios de management  y, aquí nos encontramos con un joven piloto que afirma todo lo contrario. Increíble pero real.

En declaraciones a ESPN, Jo Ramirez, quien trabajo 18 años en McLaren junto con Senna y Hakkinen (y con nacional de checo) dejó interesantes reflexiones:

-      "A Checo se le subió mucho y no se comportó bien con el equipo; no era disciplinado ni comunicativo. Hoy en la F-1 no es solo correr el auto, hay que tener todo el paquete: ser amable con la prensa, equipo y patrocinadores"

-      "He quedado muy herido, me ha dolido mucho. Ayer en la noche no pude dormir... Ha costado mucho tiempo y años para que un mexicano llegue a la F-1. Era un sueño para todos los que le ayudamos a llegar ahí. Ha durado poco porque Sergio ha cometido unos errores no solo en la pista. Hace un par de meses estaba convencido que seguiría pero no sé qué le pasó"

-      "Como piloto ha madurado mucho, pero como ser humano, como hombre todavía le falta. Tú estás empezando y representando a tu país, pagando a toda la gente que ha estado detrás. Es una pena, pero hoy en día los pilotos llegan a los 20 años o antes de los 20 años. Hay chicos que se comportan mejor; tienen un manager y escuchan a ese manager quien tiene más experiencia y Sergio decidió hacerlo solo y demostró que no pudo"

-      “Le debe de doler mucho; que McLaren lo haya decidido cambiar por un novato en un año que hay muchos cambios importantes, le ha de haber dolido mucho a Pérez"

Duele, como latinoamericano este incierto presente. México tiene un legado en el automovilismo que, de la mano de los hermanos Rodríguez en los años 60 y comienzos de los 70, los puso en la historia grande del deporte motor.

No nos olvidamos del otro mexicano, Esteban Gutiérrez, que con mucha más humildad intenta abrirse camino con un Sauber que poco tiene en común con el del 2012. Recién con el cambio de los compuestos (que volvieron a una configuración parecida a la del año pasado) pudo mejorar. Pero él es un rookie en una F1 sin pruebas (salvo la de mitad de año). Su futuro no está definido, pero tampoco tan complicado como el de Sergio.

Siempre digo, llegar a la F1 es difícil, mantenerse es complejo y, retornar, una tarea casi imposible. Prueba de ello es la situación de Jaime Alguersuari,  Vitaly Petrov, Sebastian Buemi, Kamui Kobayashi entre otros. En consecuencia, Sergio debe obtener una butaca en miras al 2014 si quiere mantener vigente su continuidad. La juventud tampoco es garantía de un posible retorno

Para concluir, y ya lo he citado en varias ocasiones esta semana, Fangio decía una máxima que es aplicable en todo ámbito: "...siempre en la vida, en todo orden, hay que tratar de ser el mejor, pero nunca creerse el mejor porque de cualquiera podemos aprender algo...". Sería positivo que Sergio Pérez la tuviera presente.

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