Han
pasado 25 años desde que la F1 desembarcó en el circuito japonés de Zuzuka en aquella hoy lejana temporada 1987.
Tuvieron que transcurrir tan solo dos años para que allí, en la tierra de los samuráis,
los dos pilotos que lucharon palmo a palmo los campeonatos de 1988, 1989 y 1990
lo definieran, en los dos últimos años, con sendas colisiones.
El
otro día compartimos la nota “GP Japón: Una reseña visual del duelo Senna-Prost de los años 1989-1990” donde se puede revivir en video los
mismos. Si tuviéramos que simplificar lo sucedido y sus consecuencias, se
podría decir que quien tuvo la culpa en la producción del incidente fue finalmente
quien se coronó campeón a la postre.
Desde
mi punto de vista es claro que Alain Prost en 1989 se cierra con antelación en
la chicana que sigue a la mítica curva 130R cuando ya, el brasileño, tenía
ganada la cuerda. Si bien Senna pudo continuar a pesar de tener dañado el
alerón delantero (entró a boxes a fin de cambiarlo) al retomar la carrera
maneja en forma superlativa para quedarse con la victoria por delante del
Benneton de Alessandro Nannini. Pero la
carrera no terminaría con la bandera a cuadros ya que los comisarios deportivos
serían los protagonistas de dicha jornada.
Secuencia fotográfica del incidente de 1989
Debemos
recordar que la interna política tras las bambalinas de la máxima era muy
fuerte. La FISA se encontraba comandada por un francés: Jean-Marie Balestre que
abiertamente apoyaba a su compatriota Prost.
Los
comisarios deportivos deciden desclasificar a Senna por haber evitado la
chicana. Con ello, le era imposible al paulista superar en puntos al francés. La
sanción al brasileño fue infundada y provocó que este pensara en abandonar la
F1. Años más tarde el entorno del quíntuple
campeón del mundo, Juan Manuel Fangio, destacó que el argentino aconsejó a Senna en dichos momentos
difíciles de su carrera para que continuara corriendo. La estima entre ambos
era recíproca y, Fangio, veía en Ayrton a su sucesor.
Claramente
la relación entre ambos pilotos -tras este incidente- se terminó de romper y,
no fue hasta finales de 1993 -cuando Prost se retira definitivamente de la
máxima al obtener su cuarta corona con Williams- que no se recompuso.
Pero
volviendo al duelo en sí, Suzuka fue testigo nuevamente en 1990 de la
definición del campeonato del mundo entre estos dos gladiadores. Prost buscaba no
solo su cuarta corona, sino que también, cortar la sequía de títulos de pilotos
que perseguía a la escuadra de Maranello desde 1979. Por su parte, Senna buscaba
repetir el título que en 1988 había logrado y que en la temporada anterior se
le había escapado por los manejos políticos de la FISA.
El
fin de semana se inició favorable para Ayrton que obtuvo la pole position. Pero
los organizadores de la carrera decidieron que el poleman laragara desde el
lado sucio de la pista. Senna reclamaba que quien obtenía la pole tenía que partir
desde la línea de carrera. Nuevamente se veía la mano de Balestre que intentaba
digitar y ayudar a Prost. Pero este año Senna tomaría la iniciativa.
La tensión era muy grande al momento de largarse la carrera. Prost tiene una mejor largada (recordemos que Senna partía del lado sucio) y se pone por delante del brasileño. Senna, esta vez, colisiona a poco de llegar a la primer curva al francés. No quería que le birlaran nuevamente el campeonato como le había sucedido el año anterior. Así saca de carrera a Prost y a su McLaren abandonando ambos. Senna no fue pasible de sanción y se coronó campeón. En las declaraciones que formalizara a la prensa ni bien llega al box se lo ve que no está contento con lo que había hecho, el quería ganar en pista el campeonato pero, deliberadamente las acciones de la FISA lo llevaron a tomar esta drástica medida.
Secuencia fotográfica del incidente de 1990
Poco más de dos décadas nos separan de esas dos definiciones que tuvieron como protagonistas a estos dos pilotos (que entre ambos suman 7 títulos de pilotos) en un mismo escenario: El circuito de “Suzuka” uno de los más desafiantes a nivel conductivo para los pilotos pero que, no cabe duda, parte de la historia grande de la F1.
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