La
carrera del día de hoy ha sido interesante en cuanto a la incertidumbre que se
tuvo hasta el último suspiro del GP británico sobre quién podía ser el ganador.
Lamentablemente, el interés de la carrera se generó por la falta de
confiabilidad de las cubiertas Pirelli que no resistían el andar de los F1 en
Silverstone. Los fantasmas de Indianapolis 2005 volvieron a resurgir en Silverstone.
Hamilton ve truncada sus posibilidades de triunfo |
Vista desde la camara de Fernando Alosno |
Hamilton,
Massa, Vergne y Perez vieron en distintos tramos de la carrera explotar la cubierta
trasera izquierda de sus monoplazas. Hasta el momento, las quejas sobre los
compuestos de la marca italiana se debían a la poca durabilidad de las mismas.
Hoy se ha pasado a un estadio de mayor gravedad: Los compuestos no resistieron el
fragor de la competencia poniendo en serio riesgo la integridad de los pilotos.
La
carrera tuvo un antes y después del primer aviso que fue dado por el reventón
de la cubierta de Hamilton (que estaba punteando el GP) en la vuelta 8. Le
siguió la Ferrari de Massa (que fue el piloto que mejor había largado) y, luego,
la víctima fue el Toro Rosso de Vergne. La incertidumbre iba in crescendo y se
les pedía a los pilotos desde el pit que no pisaran los pianitos. Por lo que la
carrera ya se encontraba desvirtuada.
Sendos
safety car tuvieron que ingresar, lo que ello produjo la reunión del pelotón y
la pérdida de cualquier ventaja que se había podido obtener. Vettel, punteaba
la carrera hasta que un problema mecánico lo obligó a abandonar y le cedió, de
esa forma, la punta a Rosberg quien, salvo por el avance de Webber (que había
largado muy mal pero, gracias al ingreso del safety car, logro recortar toda
diferencia) no vio peligrar su segundo triunfo del año
Lo
destacado, el festejo del público cuando Vettel abandono y la ovación que se
llevó Webber en el podio. Vettel podrá ser el tricampeón más joven de la
historia pero se nota que no es muy querido por sus conductas antideportivas.
McLaren nuevamente no suma puntos. La situación de la escuadra de Woking es preocupante y, parece, ya sin retorno. Williams sigue sin sumar puntos pero clasificó 11 y 12 con Maldonado y Bottas respectivamente. Force India (Sutil 7º y Di Resta 9º), Toro Rosso (Ricciardo 8º) y Sauber (Hulkenberg 10º) sumaron los últimos puntos.
Kimi Raikkonen había logrado posicionarse en el podio pero una gran perdida de rendimiento en los tramos finales de la carrera lo llevaron a perder posiciones con Webber, Alonso y finalmente con Hamilton.
Las grandes remontadas del día -más allá de la de Mark Webber- fueron las de Hamilton (4º) y Massa (6º) quienes, luego del percance con sus cubiertas tuvieron que avanzar desde la última posición. Lo del brasileño es más destacable atento que paró en boxes en cuatro oportunidades.
Claramente la
noticia -y el protagonista del día- ha sido Pirelli y su papelón en Silverstone. Poca durabilidad de los
compuestos, el testgate y, ahora, la poca confiabilidad de los compuestos
posicionan a la marca italiana en una situación compleja en cuanto a su
permanencia (por lo menos como único proveedor) en la máxima. Michelin ya ha dicho
que podría retornar como proveedor de neumáticos. En las próximas semanas se
tendrá alguna novedad sobre este tema.
En fin,
el abandono de Vettel permitió a sus más cercanos seguidores recortar la
diferencia en la lucha por el campeonato. El mismo se encuentra abierto y las
próximas dos carreras (Alemania y Hungría) delinearan seguramente quienes
lucharan por ambos campeonatos. Hoy Mercedes y Red Bull están un paso adelante,
Ferrari ha perdido un poco de terreno. ¡Hasta la semana que viene en Nurburgring!
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